Tobal Langdon Talento desperdiciado
Cantidad de envíos : 11 Dólares : 10797 Fecha de inscripción : 11/08/2009 Edad : 95 Modalidad Artística : Escritor Personalidad : es un tipo de mente abierta y agil, es serio pero tiene sentido del humor, su pasion es la literatura.
Hoja de personaje Pareja: Solter@ Pertenencias: Hobbies:
| Tema: Este es un breve relato de amor Dom Ago 23, 2009 2:47 am | |
| Estela, olvídame. Estela me esperaba en el parque, y yo con el rostro destrozado de lágrimas me acercaba poco a poco, yo no se imaginaba nuestro encuentro el más triste de todos y más loco que puede existir entre amantes. El parque, punto clave de nuestro amor, ya que ahí nos conocimos, ahí nos besamos por primera vez, ahí fue donde conocí a este ángel llamado Estela. Un lugar lleno de arboles que ensombrecen, la húmeda tierra, con unos treinta bancos contaba, separados por cinco metros unos de los otros, un suave pasto crecía día a día. Pero hoy estaba distinto, la lluvia se había detenido en la mañana y la oscura tarde de otoño se apodero de Chestnut Ville, las hojas volaba en pequeños tornados, frías y secas giraban sobre si. Me acercaba a ella, eran las once de la noche, y pude distinguir a tientas sus formados rizos castaños y su vestido hasta los tobillos. Cuando estaba a unos tres metros de ella, me detuve a contemplarla, ella aun no me veia, su mirada estaba perdida en el estrellado cielo. Era tan linda como siempre, con su rostro al descubierto, que dejaban apreciar sus ojos pardos, sus labios de muñeca, como si se los hubiesen dibujados, su busto era como el de una niña de quince años, pequeño pero hermoso, este estaba secreto por ese verde vestido que la acompañaba, danzante ante las corrientes de viento. De pronto me vio, giro brusca la cabeza y sus ojos de enterraron en los míos. - Hola amor, que bueno que has llegado, hace un rato que te espero, ¿para qué me citaste aquí tan tarde? La mire como nunca la había mirado, desde el más remoto cabello hasta sus pies de bailarina, trate de articular palabra pero estalle en llanto. - Marcos, ¿Qué ocurre amor mío? Dijo poniéndose de pie junto a mí. - Nada dulce Estela, nada. - Algo ocurre marcos, te noto preocupado, y te has puesto a llorar, no me digas que nada ocurre amor, te conozco como a mí misma. - ¡no digas eso!, tú no me conoces, dulce golondrina. Me miro con delicadeza y me abrazo, sentí sus suaves brazos sobre mis hombros, y me sentí enamorado como el primer día. - ¿Qué pasa amor?, dímelo. - ¿No has oído hablar del dolor?, tal vez no, ya que lo tienes todo, y nada te falta, ¿alguna vez has visto a un hombre llorar?, pues no lo creo, tú eras linda, adinerada y solamente una joya en este mundo, solo sirves para adornar y para que todos admiran tu belleza, si tú Estela, tú la niña mas lida que he conocido, en realidad no eres nada. Me miro con extrañeza, nunca le había hablado así, luego vi rodar por su rostro una lágrima, pero no me respondió. - ¿no me respondes?, es que es porque no conoces el mundo, has viajado por él, pero ¿lo conoces?, ¡No!, como tampoco me conoces a mí, tal vez mis besos te han hecho feliz, en cambio los tuyos no son más que reflejo de tu ignorancia. - Marcos… Dijo tímida, y triste, tenía la vista baja, pero de pronto la subió, estaba llorando. - Porque amor, porque me hablas así, ¿acaso no me amas? - ¡Ja!, que ridícula eres, mi tierna Estela. Dime tu un hombre ¿se puede alguna vez enamorar de ti? Rompió en llanto, ya no me miraba. - Yo nunca he estado enamorado de ti, tonto tal vez, que me fije en una estatua sin corazón, mira me Estela… Me miro con odio. - ¡No te amo!, y nunca lo hice. - ¡Te odio! Me grito y se alejo corriendo de mi, perdiéndose en la penumbra, vi por ultimas su esbelta y femenina silueta, y sus rizos saltando al ritmo de sus pasos. - Yo no mi amada Estela, yo no. He terminado con Estela y estoy seguro de que no volverá a buscarme, como tampoco a ella, me debe odiar y al unánime amar, lo sé, como yo la amo locamente. Que dolor me provoca pensar en ella, mi ángel, mi gota de miel. Entiende mi amada Estela, fue por tu bien, lo hice por el amor que te tengo, me he guardado hace unos meses la fatal noticia, recordaras ese día donde no nos vimos, ese día cuando visite al médico, pues bien me ha dado cinco meses de vida, vida que no quiero compartir contigo, prefiero que me odies y que me tengas en tu corazón a que te amarres a un fantasma y sufras el resto de la eternidad por él. ¡Si mi amada Estela aun te amo!, y te seguiré amando desde la muere también.
espero que les guste! | |
|